México rechaza que Estados Unidos designe a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas extranjeras. Juan Ramón de la Fuente, representante de México ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), junto con Pablo Arrocha publicaron una columna de opinión en El Universal que la designación se daría como resultado de un proceso interno de Estados Unidos, regulado por leyes como el Acta de Inmigración y Nacionalidad o el Acta de Autorización de Relaciones Extranjeras. Además, la vocera de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, desmintió que designar a los narcos como terroristas aporte mayores facultades para abordar el combate al narcotráfico, incluidas sanciones a individuos y entidades.
Según refieren en el artículo, “la ONU también ha examinado el asunto y la resolución 75/291 de la Asamblea General adoptada el 30 de julio de 2021, se expresa preocupación, pero se subraya que es en ciertos casos y en algunas regiones. Lo que se plantea es la necesidad de mejorar la cooperación a nivel nacional, subregional, regional e internacional con el fin de fortalecer la respuesta legal al problema”. Desde la perspectiva de la comunidad internacional, se reitera el mismo principio asumido por México: cooperación sí, intervencionismo no.
A decir del funcionario, “México considera que la designación de organizaciones del crimen organizado como grupos terroristas no justificará el uso de la fuerza, ya que esto sería contrario al derecho internacional”. La Carta de las Naciones Unidas reconoce el principio de la igualdad soberana de los Estados y señala que “los Miembros de la Organización, en sus relaciones internacionales, se abstendrán de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de cualquier Estado”.
Concluye diciendo que México rechaza la designación unilateral de Estados Unidos de organizaciones terroristas extranjeras y llama a la cooperación internacional para enfrentar el problema del narcotráfico con mayor eficacia.