El máximo tribunal de Nueva York declinó este martes escuchar la apelación de Donald Trump a la orden mordaza que se le impuso en su juicio, dejando las restricciones vigentes tras la condena dictada el mes pasado.
La Corte de Apelaciones, determinó que la orden no suscita problemas constitucionales «sustanciales», que ameriten una intervención inmediata.
Es el más reciente revés judicial para el expresidente republicano, que reiteradamente ha fustigado la orden que le prohíbe comentar sobre testigos, jurados u otras personas involucradas en el juicio que se le hizo por acusaciones de que pagó para tapar noticias desfavorables.
Pero la situación podría cambiar pronto: se espera que el juez del caso, Juan M. Merchan, falle en breve sobre la solicitud de la defensa de levantar la orden mordaza.